Elogio de mis estudios de medicina… mis crisis, mi crecimiento y mi triunfo

Dedicado con gran admiración y afecto a las promociones de médicos-cirujanos del país, 2020

Debo confesar que en algún momento de mis estudios de pregrado, sentí que mi vocación fallaba y se resquebrajaba… ¡Yo como que no había nacido para ser médico! ¿Sería que tal vez una vis a tergo [1] que me llevaba abandonado, lentamente, como el paso de la miel a través de un delgado tubo, un, ¨uno va porque lo empujan…¨? Aunque había comenzado mi contacto con pacientes desde mi primer año de medicina cuando asistía una vez por semana al Puesto de Socorro en la Esquina de Salas a ¨coger puntos de sutura¨ a borrachitos llenos de mala vida, olvido y cicatrices, prostitutas golpeadas con el cabello empegostado de sangre coagulada, o valientes maricones también abusados –los llamo valientes porque habían de serlo para luchar contra la intolerancia exacerbada de aquellos tiempos-;  o la ocasional herida en cruz para clavipunturas en el centro del pie ocasionado por un clavo herrumbroso y el miedo consiguiente al desarrollo de un tétanos.Leer más

Elogio del astro rey… un aliado menudo soslayado

 

Venezuela está ubicada en la zona cálida o intertropical geográfica; el Ecuador térmico, tomado como línea de referencia, corresponde a la isoterma de 28º C, o sea, la curva de las más elevadas temperaturas medias anuales. Desde el punto de vista geográfico, la zona climatológica tropical está limitada por los paralelos 35º de latitud norte y 30º de latitud sur. La temperatura en estas regiones es muy elevada y oscila entre cifras medias de 22 a 28º C, con máximas extremas de 34 a 40º. (Pifano, F. Aspectos de Medicina Tropical en Venezuela. Temas de Cátedra. O.B.E., Imprenta Universitaria, Caracas, 1964).Leer más

Triste el día de Vargas; triste el día del médico 2020…

 

 

Parábola de los talentos.

Mateo 25:14-18

¨Porque el reino de los cielos será también como un hombre que, al emprender un viaje, llamó a sus siervos y les encargó sus bienes. A uno le dio cinco talentos [2], a otro dos y a otro sólo un talento; a cada uno según su capacidad. Luego se fue de viaje. El que había recibido los cinco talentos fue enseguida y negoció con ellos y ganó otros cinco. Así mismo, el que recibió dos talentos, ganó dos más. Pero el que había recibido uno talento, cavó un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor.Leer más

Elogio de buen paciente II… ¿Una segunda opinión para Pasible Amerced…?

Aún en estos tiempos de fácil y abierta comunicación, existe un asincronismo entre el conocimiento moderno, su adquisición por parte del conglomerado médico y el descarte de viejas e inoperantes actitudes. Algunos doctores simplificamos nuestra práctica al punto de nunca enterarnos de los nuevos avances en materia médica; otros, por enterarnos demasiado pronto, de inmediato los adoptamos, sin conceder algún tiempo para que ‘la sustancia’ se decante…Leer más