Según el Diccionario de la Iglesia Católica, las cuatro postrimerías son las etapas que debe pasar el ser humano después de su muerte: muerte, jucio, infierno y gloria. Su iconografía ha sido inspiración para artistas como El Bosco (Jheronimus van Aken). Me llama la atención el infierno: está preparado para el Diablo y sus ángeles, donde imperan las tinieblas y el silencio de la ausencia de Dios (Mateo 13:49-50), lugar donde solo se escucha el llanto de los condenados y su crujir de dientes; es una suerte de abismo y prisión al mismo tiempo donde solo hay tormento y aflicción por la exclusión de la presencia de Dios.Leer más